Palabras
Autor: Juan Guillermo Espinosa Carmona | Fecha: 2011-03-31 | ID: 421 | Categoría: Espíritu | Tema: Reflexiones | Tipo: Pensamientos
AGRADECIMIENTO DE JUAN GUILLERMO ESPINOSA, CON MOTIVO DE LA CELEBRACIÓN DE SU CUMPLEAÑOS, EN EL COLEGIO DE INGENIEROS DE CHILE
Les agradezco muy profundamente esta celebración por el afecto, la fraternidad y solidaridad que representa, viniendo especialmente de ustedes, que son mis compañeros de ruta o mis hermanos de trayectoria, a lo largo de toda nuestra vida profesional.
He querido poner por escrito estas palabras para ser más breve y ser más preciso. Porque la lectura nos hace más cultos, pero la escritura nos hace más precisos.
Sé que en esta convocatoria han existido "causas abiertas" y "otras encubiertas". Las causas abiertas: son esta franca expresión de afecto y fraternidad por todo un camino recorrido en conjunto. Las "encubiertas": son el ánimo de algunos de disimular a expensas mías, el gran número de años que hemos transitado por este mundo.
Como ustedes saben, desde la universidad y en mi vida profesional he transitado desde la Ingenieria Civil a la Ingenieria Económica, de ahí a la Economía Industrial y despues de esta a la Economía Social, para llegar en los últimos años a una visión mas multidiciplinaria de nuestra vida profesional - mas cercana a la Ingeniería Social o a la Ingeniería del Desarrollo, pero Desarrollo con mayúscula.
Creo que los años que nos han tocado vivir, han sido de grandes y profundos cambios, que no imaginabamos en nuestros años universitarios. Algunos podrían pensar que se nos ha hecho mas facil por los grandes avances y primacía de la técnica, que hoy casi predomina en todos los campos. Sin embargo, esto nos ha exigido un empeño constante de actualización de conocimientos y una permanente renovación de enfoques y visiones para ser mejores.
La tarea no ha sido facil, porque como dice un gran pensador y escritor aleman: "para ser mejor, sé que debo cambiar / pero aun cambiando, no se si seré mejor".
Ademas, en el tecnificado y materialista mundo actual, Charles Taylor un gran filósofo canadiense nos advierte: "en este tiempo todos hablan y priorizan las técnicas y los métodos… y ya casi nadie habla del sentido".
Todos ustedes saben que tengo una visión humanista y cristiana de la existencia, por lo cual pienso que cada ser humano tiene un tiempo aquí en la tierra, no elegido por él, y cada tiempo tiene sus luces y sus sombras. El asunto está en que uno puede sumarse a las siempre fáciles tinieblas, al desánimo o a la indiferencia, o intentar introducir un pequeño rayo de luz en todo nuestro entorno o en todo lo que pienses o en todo lo que hagas.
Se trata de elevar al máximo posible las costumbres, las técnicas y los métodos, al nivel del sentido más elevado, de la Etica con mayúscula, como nos ha recordado tan sabiamente nuestro profesor Modesto Collados cuando llegamos a los 40 años de egresados de Ingeniería. Se trata, precisamente de no rebajar esta ética al nivel de las costumbres.
En este tiempo específico en que ahora estamos, de gran sufrimiento en nuestro país ante el gigantesco terremoto y maremoto que ayer 27 de febrero conmemorábamos, creo que es el mas grande ejemplo de lo que trato de decir. La posibilidad de sentir el sufrimiento ajeno, precisamente crea el ser moral, el sentido ético, que se esfuerza en disminuir entre los seres humanos el dolor y las cargas de la vida, que en este caso particular, muy afortunamente la ingeniería chilena ha podido contribuir tan maravillosamente.
Todos nacemos quizas mas buenos, mediocres o malos. Pero al igual que la inteligencia, el sentido ético es susceptible de desarrollo mediante la educación, la disciplina y la voluntad.
Sin el ejercicio de la voluntad y el entusiasmo, la inteligencia permanece dispersa y esteril. Una vez disciplinada se hace capaz de perseguir la verdad. Pero esta verdad, solo se alcanza plenamente cuando recibe la ayuda del sentido moral.
A propósito de la voluntad y el entusiasmo, quiero compartir con ustedes en esta ocasión, las palabras que el General Mac Arthur le dirigió a los cadetes de West Point antes de su retiro, en torno al espíritu joven.
En dos palabras, Mac Arthur nos dice que la juventud no es un período de la vida sino que un estado del espíritu.
"Juventud significa una victoria del valor sobre la timidez, del ansia de aventura sobre el deseo de quietud.
"Una persona no se vuelve vieja por haber pasado un cierto número de años.
"Uno se vuelve viejo por haber abandonado sus ideales.
" Los años arrugan la piel, pero renunciar a los ideales contrae y arruga el alma."
"Si algún día tu corazón se cubre con el frío del pesimismo, entonces sí estaras envejeciendo y ojalá Dios tenga piedad de tu alma de anciano".
Yo agregaría que: precisamente, las preocupaciones, las dudas, los temores, las desesperanzas y los años mal vividos, son los enemigos que lentamente nos hacen caer en la depresión y en restarnos de participar y contribuír en la preciosa vida que tenemos.
Recordémonos siempre; que - serás tan jóven como la confianza que tengas en ti mismo y en los tuyos y serás tan viejo como tus frustraciones y pesadumbres; - seguirás siendo tan joven como tu esperanza y alegría y tan viejo como tu escepticismo y amargura.
En nuestro mundo, la mayoría de las personas se presenta como muy feliz, pues si se es infeliz se es un fracaso, un failure como se dice ahora.
Debemos recordarnos entonces, que la alegría es el resultado de vivir intensamente. Ser feliz significa vivir plenamente y no en un vacío que haya que llenar. Significa darse por entero y viviendo y aportando en el presente y no en el pasado ni en el futuro.
Precisamente, los filósofos griegos nos decían que lo que mas perturba al ser humano es el pasado, que ya no volverá ni podemos cambiar, y el futuro que aún no está aquí.
Hay otra versión mas cotidiana y hedonista de la felicidad, que señala que, para ser feliz hay que: mantenerse en forma, buscarse unas aficiones estimulantes y potenciar las relaciones íntimas, así como otras cosas que no puedo mencionar aquí.
En definitiva, la felicidad que podemos alcanzar, va unida a un aumento de la vitalidad, de la fuerza interior que desarrollemos, de la intensidad del pensamiento positivo y de la productividad.
Pero hay que recordar, por último, que en la vida lo más importante no es ser feliz sino estar vivo, pero plenamente vivo.
Por lo anterior y por lo que en estos momentos celebramos - meses más o meses menos, porque estamos todos en el mismo barco - les pido muy sinceramente: que por favor no desmayen, que persistan, no permitan que les decaiga el ánimo. Salomón decía que "el ánimo gozoso hace florida la vida; el espíritu triste marchita la existencia". Por esto les pido y les deseo que - independiente de nuestros años - vivamos el tiempo que viene lo más plenamente y con el mayor aporte posible. Creo que es el mejor regalo que nos podemos hacer a nosotros mismos, a todos los que nos rodean y al mundo actual.
Juan Guillermo Espinosa C.
Santiago, 28 Febrero 2011