Tiempos de cambio
Autor: Patricia Gómez | Fecha: 2013-11-03 | ID: 31 | Categoría: Espíritu | Tema: Mente | Tipo: Pensamientos
¿Se es espiritual por dejar de comer carne, hablar de quien es el observador o que todos somos consciencia?. ¿Abrazarse ante una luna llena, recitar mantras, meditar u orar por largas horas sin comprender en real esencia lo que somos, porqué existimos y para dónde vamos?. ¿Se es espiritual por asirse al orador de moda, especulador o canalizador que nos entregue la teoría que jamás podrás comprobar, sólo creer ciegamente. Creer y seguir como si fuera una novela bien narrada y tú un buen y obediente lector?
Ser es más que dejar de hacer. Ser, no es creer ni crear. Ser, es ser consciente de lo que se es POR COMPRENDER.
Ya no es tiempo de creer que despertaremos por aprender, escuchar, estudiar o repetir. Tampoco por seguir a un guía, una doctrina o religión, cualquiera sea esta. No lo es por pagar para recibir en un curso dictado en dos días o una semana la iluminación. Ya no…, nunca lo fue…
El planeta sufre, la humanidad sufre y se destruye en su propia y ciega esclavitud.
Estamos en el tiempo de comprender que sólo se puede ser consciente al SER EN ESE ÚNICO INSTANTE PRESENTE. Sin pensamientos, sensación, anhelo, sin deseo alguno. Ser en la quietud de tu propia profundidad, despertando del profundo sueño e ilusión en que se vive.
¿Y cómo realmente se consigue despertar esa consciencia?
Invirtiendo toda esa energía que te atraviesa, contiene y mueve en ti, hacia dentro. Siendo silente y profundamente en aquello que eres. En aquello que la consciencia es.
“Soy lo que te mueve, el que observa, lo observado, soy en la compasión, el dolor y la risa. La generosa mano que tiembla ante la vejez abandonada. Soy el animal herido, el niño hambriento, la pobreza extrema, el desahuciado, el animal atormentado…, y, ¿no me ves?. ¿No eres consciente que me tocas en cada cosa que observas a través del pensamiento?
“Te digo, soy, la manifestación de todo acto, la esencia de cada ser vivo, soy tú tocando cada evento que experimenta la humanidad. ¿No lo entiendes? Soy la muerte en las guerrillas, en los gobiernos que mutilan la libertad. Los hijos abandonados, las madres solitarias. El hombre desgastado y abatido. Ciego de deseo. La mujer profanada por la forma. Los soldados que han vendido su libertad”
Dejamos de escuchar nuestra propia voz para seguir la de otro. ¿por qué?, ¿es distinto a ti, no ves que ÉL ES TÚ?
La consciencia ES en cada ser humano, late bajo cada piedra que levantas, en cada madera que rompes con tu mano. En el trigo, en la herida pestilente, en la muerte, ¡en lo nuevo!. En el cosmos…, en cada universo que percibe tu alma. Es el águila, el pez que en danza espiral se hunde en el océano. La selva brotando incansable, el árbol que cortas, el ser vivo que te comes. Sí…, el ser vivo que te comes.
(El que pudo experimentar una vida en armonía y sin embargo permitimos que viviera una vida miserable sólo para que engorde más rápido, con sufrimiento y TORTURAS INDECIBLES para que llegue a la placidez de tu boca. ¿y crees ser espiritual con sólo esconder la cabeza para no saber, no mirar, no enterarte… ?)
Soy tanto y todo, y aún así, ¿no me ves…?
Una mente en calma es la primera puerta para el primer paso para el primer atisbo para la primera chispa que encenderá toda la energía que hay en ti, en el universo, en Dios…, que no es otra cosa que consciencia experimentando existir.
Debemos luchar por ser en ese delicado estado. Luchar con todos nuestros deseos, miedos y apegos, con todo lo que se venga…, luchar para no luchar más… luchar por ser luz silente que apague la oscuridad que reina en nuestro amado planeta.
Un ser consciente es aquel que te entrega paz con su sola proximidad. Ya nada tiene, o puede tenerlo todo, pero sin apegos porque comprende que es una ilusión y nada necesita. Tiene ojos limpios ya que refleja la nada y la maravillosa singularidad de cada milagroso evento que ocurre en el minúsculo instante donde se da la creación. Nada tiene que enseñarte por que la comprensión no se enseña.
Ser espiritual, simplemente es ser en ti mismo sin anhelo alguno de deseo, temor o ansias, sólo siendo en la brisa que acaricia tu rostro y más…
Presenciando la espléndida oportunidad de despertar del sueño en el que sueño…, que soy.
LA OSCURIDAD, EL CAOS Y LA CEGUERA, SÓLO SE APAGAN CON LA LUZ..
Patricia Gómez
