El papel de regalo
Autor: Francisco Bascuñán Walker | Fecha: 2012-07-31 | ID: 292 | Categoría: Espíritu | Tema: Reflexiones | Tipo: Pensamientos
Dios te habla por medio del sentir de tu alma, por medio de tus pensamientos e intuiciones
Dios te habla en tu palabra atenta, mesurada y prudente y te habla a través de tus acciones cuidadosas.
Dios te habla por medio de palabras y acciones de otras personas que te dan la llave de la puerta que debes abrir.
—EL MAESTRO
La primera vez que me sucedió tenía 16 años, bailaba con la niña más linda de la fiesta (o eso creía yo al menos).... Estaba alegre, entusiasmado, conversábamos como viejos amigos que no se veían hace años. El tema es que ya le había preguntado dos veces su nombre y francamente no lo recordaba. Que desastre, mi mente lejos de ahí no fue capaz de recordar ni su nombre ni su teléfono....fue la única vez que la vi, mi mente no me permitió capturar el regalo del ahora, del presente.
Cuando mi mente está lejos me pierdo lo importante, y la mayoría de las veces lo que sucede en el AHORA tiene más respuestas que las que puedo encontrar vagando lejos.
Desde entonces, siempre trato de escapar DE mi mente, de planes y recuerdos, y enfocarme en el nombre de la persona que tengo al frente, en lo que me dice… enfocarme en lo que sucede ahora... no siempre me resulta, mi mente es un poco indomable y siempre está agitada.
“El Mastra”, un gran y querido profesor, nos preguntaba
..... ¿Que le falta a éste momento?...
Todos comenzábamos a prestar atención a la luz, el sonido, el color, la temperatura, la gente...tratando de entender que faltaba.
La verdad, decía él, no importa la respuesta, solo que Uds. se sitúen en el aquí y el ahora.
Cuando eso me sucede, me conecto con algo mayor que mi mente, me conecto con mi CONCIENCIA y me lleno de tranquilidad, escucho mi cuerpo, mi alma....aparecen las intuiciones, ESA VOZ INERIOR que habla con propiedad y certeza.
Una fuerza poderosa habita en el ahora, una conexión con la verdad, con lo que ES, con lo innegable.
En la conciencia plena e iluminada del presente aparece una luz, un regalo y una respuesta.... Cuando los problemas y la tristeza me invaden me conecto con lo que sucede ahora, con mi respiración, con el sol o la naturaleza que me rodea… presto atención a donde estoy y como estoy… guardo silencio y encuentro esa tranquilidad suave, llena de ideas, esperanza y fuerza.
Creo que esa es la manera que Dios se comunica conmigo, porque me habla a través de lo que sucede, de lo que me rodea o de lo más profundo de mi mismo, y lo puedo escuchar si mi mente se caya y guarda silencio un rato.
Para mí, esa conexión está más allá de mi mente y mis pensamientos, más allá de esa agitación que me impide ver… está justamente al frente mío, en la serenidad de lo que es, en la aceptación de las cosas que son ahora, como un papel que se estira y se abre dejándome ver aquello que estaba escondido a mis ojos.
